La tecnología convencional de las baterías de plomo-ácido (húmedas) es perfecta para aplicaciones de arranque de motores térmicos en las que se requiere una potencia de arranque elevada, sobre todo a baja temperatura.
Estas baterías están catalogadas como baterías libres de mantenimiento (tecnología PbCa) y se utilizan principalmente en coches; las baterías de bajo mantenimiento (tecnología híbrida PbSb-PbCa) son baterías de servicio pesado para tractores, autobuses y camiones, en los que se requieren prestaciones más elevadas en cuanto a ciclos de carga/descarga y resistencia a la vibración.